Agrosavia apoya emprendimientos indígenas

Redacción Portada

La Corporación colombiana de investigación agropecuaria – AGROSAVIA en alianza con el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT), la iniciativa de Cooperación para la Alimentación y la Agricultura entre Corea y Latinoamérica (KolFACI) y FONTAGRO apoyan los emprendimientos basados en cultivos biofortificados de las comunidades étnicas del Caribe colombiano que hicieron presencia en el marco del primer festival étnico intercultural realizado en Valledupar, Cesar, con el fin de integrar a los pueblos indígenas, reforzar sus actividades en el sector agropecuario, resaltar sus tradiciones y preservar su diversidad cultural.

AGROSAVIA hizo presencia con las ofertas tecnológicas que actualmente está dinamizando con las etnias de la Sierra Nevada y teniendo en cuenta las diferentes manifestaciones culturales que aluden a la relación de las comunidades con la naturaleza y la producción de alimentos, AGROSAVIA contribuye como agente integrador de actores de interés para la atención a los pueblos que habitan en la serranía.

En este espacio se dio a conocer y resaltar la tradición a través las artesanías, gastronomía y muestras artísticas de los pueblos Arhuaco, Inga, Kankuamo, Wiwa, Zenú, Chimilia, Kogui, Yukpa, Afro y Wayúu. La concentración de líderes de las distintas comunidades en el festival propició los diálogos con los investigadores de AGROSAVIA y la entrega de material técnico de acuerdo con los intereses productivos en las diferentes zonas de influencia de cada comunidad.

Uno de los aspectos más relevantes se derivó del apoyo a través de las iniciativas de AGRILAC, KOLFACI y FONTAGRO a la comunidad arhuaca Umuriwa al semillero FONDOACCIÓN quienes han empoderado a los jóvenes en producción artesanal de bioinsumos y a la gastronomía. Estas capacidades comunitarias se han fortalecido con estos proyectos al incluir los productos locales en el manejo de los cultivos y los fríjoles biofortificados en las recetas tradicionales como los bollos de yuca, coco y fríjol biofortificado dulce. También en las preparaciones gourmet desarrolladas en la academia de gastronomía gato Dumas en Barranquilla como los snacks de plátano con cremoso de fríjol biofortificado. La producción agroecológica de variedades con alto valor nutricional y la transformación de alimentos evidenciaron nuevas oportunidades de desarrollo autónomo de las comunidades étnicas.

Con lo anterior, se puede notar los esfuerzos de AGROSAVIA de llegar y trabajar con las comunidades más vulnerables llevando ciencia e innovación para que la agricultura colombiana sea más competitiva y se fortalezca. De igual manera, las alianzas con actores nacionales e internacionales que robustecen la investigación y permiten un mayor acercamiento a diferentes zonas del país es un pilar que la Corporación implementa dentro de la estrategia corporativa para transformar de manera sostenible el sector agropecuario con el poder del conocimiento para mejorar la vida de productores y consumidores.

El director del Centro de Investigación Motilonia de AGROSAVIA, Mario Zapata, desarrolló reuniones con los líderes de las etnias e identificando las oportunidades de formulación de nuevos proyectos y alianzas en las que retomó las palabras del cabildo gobernador Arhuaco Zarwawiko Torres: “tejer el conocimiento tradicional y el occidental para elaborar el manto que proteja a la sierra”.

Por su lado, Alejandra Izquierdo, la jefe de cultura de la alcaldía de Valledupar refuerza el papel de la mujer como heredera de la madre tierra con sus collares que representan semillas y su papel en tejidos transformadores para las siguientes generaciones. “Tenemos que empezar a transformar con apuestas que puedan ayudar a ese fortalecimiento de los pueblos indígenas a través de entidades como AGROSAVIA que respetan nuestra gobernanza”. La jefe de cultura propiciará en diciembre mesas de trabajo con AGROSAVIA para la integración de iniciativas agrícolas que refuercen la etnicidad. El papel de la huerta en el fortalecimiento de la etnicidad lo manifestó Seyningumu Torres, técnico étnico articulado a la modalidad propia de ICBF: “fortalecer las huertas es fortalecer la cultura porque la huerta se convierte en un espacio donde hablamos y difundimos nuestras tradiciones culturales y espirituales”.

Este fortalecimiento de las huertas ha sido la contribución de los proyectos AGRILAC en el que se estableció participativamente una parcela en la finca comunitaria La Lucha con tres especies biofortificadas: maíz bio MZn01, Fedearroz BioZn035 y fríjol biofortificado AGROSAVIA rojo 43. El manejo de la parcela ha hecho uso de extractos de plantas naturales que repelen los insectos, controlan patógenos y supermagro para la adecuada nutrición. Este proyecto también aportó el fríjol biofortificado con el que se elaboraron las preparaciones propias y gourmet que se expendieron en el quiosco del semillero Fondoacción asignado en el Festival étnico intercultural.

De igual forma, el proyecto fríjol de sequía financiado por KOLFACI instalará una huerta con genotipos élite seleccionados por la misma comunidad, sembrados en policultivo de acuerdo con las costumbres tradicionales y bajo manejo agroecológico en la comunidad de Umuriwa. Finalmente, el proyecto de FONTAGRO fríjol con alto hierro para Latinoamérica y el Caribe, financiará las actualizaciones de las lideresas empoderadas en las huertas de modalidad propia de ICBF en manejo orgánico y se entregarán semillas de fríjol biofortificado AGROSAVIA rojo 43.

La visión integral de los pueblos ancestrales alrededor de las huertas se materializó en el festival: pues el arte, la cultura, la espiritualidad refleja la armonización que se extendió al Barrio VillaMiriam de Valledupar donde se entretejieron con la ciencia y la innovación de AGROSAVIA.